Se celebró la procesión del Corpus. La larga y tediosa procesión del Corpus.
El pasado año se incorporó la imágen de Santa Ángela de la Cruz al cortejo, una talla procedente del mismo convento de las Hermanas de la Cruz. Este año se estrenaba una nueva imágen obra de Navarro Arteaga para que, ya durante el año, se venere en la Santa Iglesia Catedral.
Ésto, para un escultor, debe ser un grandísimo honor, un premio, uno de los mayores hitos para sí mismo, debido a la calidad e importancia que el cortejo guarda en riqueza y tallas.
Creo que, en mi humilde opinión, Navarro Arteaga se ha equivocado. Si hace tan sólo un mes tenía la talla en madera, no hay otra forma de ver el asunto como el que se ha hecho a la ligera.
Los escultores que han tallado para el Corpus de Sevilla son: Duque Cornejo, Pedro Roldán, Martínez Montañés y Alonso Martínez; los grandes maestros de la imaginería sevillana en la que tan sólo queda fuera Juan de Mesa.
Para un escultor, ser partícipe de ésta procesión debe ser la cota más alta a la que llegar.
Desconozco el criterio que se ha llevado para elegir a Navarro Arteaga, que, siendo justos, ha demostrado una gran valía como escultor contemporáneo. Pero llegado el punto de realizar una obra de esta envergadura, pienso que ha debido echar el resto para convertirla en su obra cumbre.
En mi opinión, la imágen de Santa Ángela que salió ayer en el Corpus de Sevilla en nada se me representa a la que hace honor. En lo único que sí se me parece es el hábito.
Hacer una imágen de San Fernando, de San Isidoro, de San Leandro, de las Santas Justa y Rufina, etc, conlleva el casi "inventarse" los rasgos; pero de Santa Ángela de la Cruz... cuando abundan fotografías de ella en vida, cuando todos tenemos grabada su cara en nuestro pensamiento, cuando hay datos de sobra para acertar casi al 100% en su ejecución... Y nos encontramos con una Santa "metidita en carnes", alta y anchita de cara. Creo que tres características contrarias a lo que realmente era.
Posiblemente me equivoque, pero con todos los que ayer comenté ésto, y eran grandes cofrades, coincidían en éste parecer.
Aquí dejo algunas fotografías, que me ha enviado mi tío Eugenio Borrego Páez, del paso de Santa Ángela y de la representación de la Hermandad de la Amargura.
El pasado año se incorporó la imágen de Santa Ángela de la Cruz al cortejo, una talla procedente del mismo convento de las Hermanas de la Cruz. Este año se estrenaba una nueva imágen obra de Navarro Arteaga para que, ya durante el año, se venere en la Santa Iglesia Catedral.
Ésto, para un escultor, debe ser un grandísimo honor, un premio, uno de los mayores hitos para sí mismo, debido a la calidad e importancia que el cortejo guarda en riqueza y tallas.
Creo que, en mi humilde opinión, Navarro Arteaga se ha equivocado. Si hace tan sólo un mes tenía la talla en madera, no hay otra forma de ver el asunto como el que se ha hecho a la ligera.
Los escultores que han tallado para el Corpus de Sevilla son: Duque Cornejo, Pedro Roldán, Martínez Montañés y Alonso Martínez; los grandes maestros de la imaginería sevillana en la que tan sólo queda fuera Juan de Mesa.
Para un escultor, ser partícipe de ésta procesión debe ser la cota más alta a la que llegar.
Desconozco el criterio que se ha llevado para elegir a Navarro Arteaga, que, siendo justos, ha demostrado una gran valía como escultor contemporáneo. Pero llegado el punto de realizar una obra de esta envergadura, pienso que ha debido echar el resto para convertirla en su obra cumbre.
En mi opinión, la imágen de Santa Ángela que salió ayer en el Corpus de Sevilla en nada se me representa a la que hace honor. En lo único que sí se me parece es el hábito.
Hacer una imágen de San Fernando, de San Isidoro, de San Leandro, de las Santas Justa y Rufina, etc, conlleva el casi "inventarse" los rasgos; pero de Santa Ángela de la Cruz... cuando abundan fotografías de ella en vida, cuando todos tenemos grabada su cara en nuestro pensamiento, cuando hay datos de sobra para acertar casi al 100% en su ejecución... Y nos encontramos con una Santa "metidita en carnes", alta y anchita de cara. Creo que tres características contrarias a lo que realmente era.
Posiblemente me equivoque, pero con todos los que ayer comenté ésto, y eran grandes cofrades, coincidían en éste parecer.
Aquí dejo algunas fotografías, que me ha enviado mi tío Eugenio Borrego Páez, del paso de Santa Ángela y de la representación de la Hermandad de la Amargura.
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